Mi cárcel es la tierra
Mi
celda mi país
Mi
némesis yace cerca
Mi
condena va en el Ser.
Emparedado,
monólogo de amanecer
Ese
discernir entre bondad y maldad
Conveniencia
de sociedad.
Lo de
impoluto: No viene No va,
Me lo
bebo en sorbos de amargura.
La casa
por cárcel va en mi locura.
Mi
uniforme es de preso, no de cura.
El de
soldado: ni va ni viene;
Éste,
de réprobo al menos tiene
Mi estigma
definido.
El de
apóstol, el de cadete, los dos se han ido
Entre
ramas de confeso y de bandido.
El mío
no me atiene a ser converso
Ni de
religión, ni de partido.
Soy un
preso, nada pido
Ni a
este mundo, ni a los dioses.
Soy un
reo, no tengo poses,
La
ausencia es mi presidio.
Soy un
penado, sin la clemencia
Del
infinito firmamento.
A las estrellas,
de amor no miento,
A él me
debo, en él, me confieso.
Por
amar estuve preso
En
corrillos de mixtura,
Del
odio que fulgura,
A ellos
con mi magín degüello.
Afectos
de aventurero destello
Con
arrojo de ermitaño.
Por
mis senderos pasan los años
De joven
a adulto, de una vez.
Mi Ser
inestable sonroja la tez
Del
más optimista y feliz.
Logro
a la muerte doblar su cerviz.
Soy un
preso de la nada.
Sin
raza, de nacionalidad errada.
@mariosalinas61
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